Hoy en Radio Rociana, he prestado mucha atención al escuchar que se ha convocado una manifestación para reclamar el derecho de que se contrate mano de obra local.
Yo vengo de una familia de productores de fresas y frambuesas, y ante lo que he escuchado, respetando, por supuesto, la libertad individual, el derecho de todo ciudadano de manifestarse, no puedo dejar de sentirme indignada.
Entiendo que en los tiempos que corren y con el paro que existe en nuestra localidad, la gente necesite trabajar, pero, es que yo llevo escuchando a lo largo de mi existencia que “el campo es lo último…” , “que el campo no lo quiere nadie….”. Para mucha gente el campo no ha tenido valor.
Como he dicho antes, mi familia es de agricultores, y hasta que llegó la contratación en origen, he visto como mi padre se partía la cabeza cuando llegaban Cruces, Comuniones, El Rocío, etc.……, como la fruta se quedaba en el campo por falta de mano de obra local, recordemos que el máximo esplendor de la campaña de la fresa se produce entre abril y mayo y es, en estos meses cuando la fresa necesita una mayor dedicación. Que empezaba la campaña y faltaba gente, ¿Cuanta gente optó por la construcción, la hostelería,……?
Trabajo siempre ha visto en el campo, lo que no había gente para desempeñar sus labores.
El empresario agrícola nunca se quejó ni se manifestó para exigir mano de obra local, simplemente se limitaron a buscar soluciones para realizar la recogida con los menos problemas posibles.
Con la llegada de la contratación en origen se proporcionó al sector SEGURIDAD, la gente contratada se comprometen a trabajar la totalidad de la campaña, puesto que a eso es a lo que vienen a trabajar.
Espero que, a partir de ahora, todos tomemos conciencia de que el campo representa en nuestra economía un sector fundamental, y que todos intentemos, poniendo de nuestra parte, dar con la mejor solución.